En nuestro cambio de carpinterías decidimos apostar por un marco de calidad algo mejor (U=1.1 W/m2K) y pasamos a escoger un vidrio triple bajo emisivo, con dos cámaras de aire rellenas de argón. Valor U=1.1 W/m2K.
Los valores obtenidos en este caso son:
Conseguiremos reducir ligeramente tanto la carga de calefacción como la de refrigeración.
¿Pero... cuánto más nos supondría esta mejora a nuestros bolsillos?
Pues los precios que se barajan en el mercado están en torno a:
Precio medio vidrio doble: 38 €/m2 (vidrio doble 4/6/4 transparente con control solar)
Precio medio vidrio triple: 69 €/m2 (vidrio triple 6/14/4/14/4 transparente con control solar)
En la vivienda modelada tenemos un total de 9 ventanas, que suman una superficie de vidrio de 20.36 m2. Colocando vidrio doble haríamos una inversión de 773.68 €. Frente a una inversión de 1.404,84 € en el caso de colocar vidrios triples.
No es un desembolso mucho mayor el que habría que hacer, pero es cierto que no tiene una relevancia tan significativa en el ahorro de demanda energética (comparada con la que la ventana de vidrio doble tiene frente a la ventana de vidrio simple). Aún así, toda mejora y todo ahorro energético es beneficioso.
Esta repercusión de ventana doble frente a ventana triple, es un parámetro que habría que estudiar teniendo en cuenta la ubicación de la vivienda. Quizá en climas fríos, su uso esté mucho más justificado que en un clima cálido. Lo analizaremos con detalle más adelante, en una publicación que sitúe esta misma vivienda modelada en los distintos climas de nuestra Península.
De momento, para finalizar, señalar que en un edificio mal aislado, no merecerá la pena invertir en la colocación de vidrios triples, ni siquiera vidrios dobles, sin previamente haber mejorado el aislamiento y la hermeticidad de la vivienda.
Elena de Castro